Sentada frente a la compu, pasan nueve minutos de la una de la mañana...estoy en la casa de mis papás, todos duermen y sólo la luz del monitor alumbra el living...afuera llueve, finito, pero igual moja...hace días que tengo ganas de escribir, prendo la compu y me cuelgo viendo fotos, las últimas, las viejas...y me cuelgo.
Esta noche, después de cinco noches de aquella que estuve mal por amor...después de que la sinceridad de un hombre me haya lastimado hasta tal punto de quedar sin lágrimas, me siento a pensar qué significó este año para mi. Y si me pongo a ver hacia atrás, fue bastante bueno- y se me acaba de dibujar una sonrisa en la cara- veamos...
Los 360 y pico de días que se pasaron dejaron risas, abrazos, sueños cumplidos, sueños nuevos, metas alcanzadas, etapas cumplidas, choques, besos, borracheras graciosas, borracheras desagradables, peleas buenas, viajes...
Camino por la recta final de los "locos 22" años, y es que en menos de un mes vamos para el que sigue y en estos 22, experimenté las risas de esas a más no poder, de esas que llorás y que te hacen doler los cachetes. Risas por las payasadas de mi hermano Facu, cada fin de semana que vuelví a esta casa; risas por las macanas que hablo sin saber y que provocan la carcajada de mi mamá que con sólo mirarme sabía que no tenía idea de lo que hablaba; risas de las cosas que vivimos con la Ju en el dpto cada vez que entró esa maldita mariposa marrón enorme, de esas que salen en verano y a las que le tengo terror... Pensándolo bien...este año fue gracioso...muy...
Me queda la imagen de los abrazos de cada fecha especial, y de cada martes cuando vuelvo a la casita y dejo el hogar de mis papás, el abrazo de Ju ese día que no sabía donde estaba y que me preocupé tanto...los abrazos de mis amigos, se me vienen a la cabeza los últimos, precisamente los del sábado a la madrugada mientras César me decía..."Ay, Vick, no llorés así, no vale la pena"...Uf...hubo todo tipo de abrazos...y cada uno me llenó el alma.
Si hablo de los sueños cumplidos...y de las etapas concluidas, este año terminé mi posgrado y agregué una palabra más a mi nombre profesional: "Especialista en Dirección de Recursos Humanos"... Chuuuu! ¡cómo suena! Y sí, fueron casi dos años de estudio fuleros... si me acuerdo que ese marzo que comencé estaba muerta de miedo, miedo de encontrar en el posgrado mi "techo" intelectual y de decir "hasta aquí llego, la cabeza no me da para más". Y aunque no me jacto de ser inteligente, lo terminé y con la mejor de las notas-más allá del hermoso nueve de mi trabajo final- estoy orgullosa de mi desempeño para qué les voy a mentir. Todavía no tengo el cerebro achicharrado así que... voy a ir por más!
¿Sueños nuevos? de eso se trata, no? de ir alcanzándolos, renovándolos, persiguiéndolos, intentando volar alto...proyectando redoblar la apuesta y alejarme de la casa, de la casita, de la flia, de los amigos y partir al otro lado del océano y probar cuánto mi espíritu soporta mi cuerpo y cuánto mi cuerpo soporta mi alma.
Este año también dejó choques...sí...mujer al volante...jajaja un amigo me dijo: " cuando alguien te putee cuando vayas manejando vos respondé y bueno, soy mujer". Así, cada vez que tuve un problema llamé a mi amigo Martín, él- incondicional- acudió ante cada percance automovilístico. "Hiciste aca el auto!-me dijo a mitad de año mi papá- venías fuerte?" y yo: "no, bueno...definí fuerte"...hasta que me solté y hoy puedo decir que me doy maña en el tutú, jajaj...no soy un corredor de fórmula uno, pero ahora puteo y todo...
Qué decir de los besos...hubo buenos, muy buenos...de esos tímidos, de esos fogosos, de esos enamorados...son y van a ser involvidables y dejaron sensaciones grabadas a fuego en mi, a pesar de que la persona que me dio los más lindos y rememorables es la que más me lastimó...pero si no me arriesgaba nunca iba a conocerlo, son las reglas del juego, eso creo.
Y es el turno del control de alcoholemia...juaz! no, nunca conduzco ebria...este año experimenté con gracia y junto a mis mejores amigos los efectos del toc toc...y se me vienen a la cabeza las noches en "El Rancho" con la Ju, Rodo, Martín, Maxi, Euge, Soto!, Emilio y Machi en la barra pidiendo ¡tequila, tequila! y venía el tipito de la barra con la sal, el limón y la bebida que nos hacía mover el piso...cómo nos divertimos!...Después, las salidas de "La boite" con la Pivi y nuestros cantos al compás de algún ritmo que inventamos, con la letra de improvisada sobre algo que acabábamos de ver, mientras caminábamos buscando el taxi que nos lleve a casa...y a dormir. La peor de las borracheras, también la tuve y fue la que provocó una de las peores peleas con mi hermana, pero de la que prefiero ver la parte buena- porque la mala fue que se asustó tanto que tuvo que ir a una sala de emergencias, porque le subió la presión- sí, le puedo ver la parte buena...y es que ahí me cayó la ficha que allá, en la casita, estamos sólo las dos y que nos tenemos que cuidar y que somos responsables por la otra, su susto me demostró cuánto me ama y su preocupación cuan responsable se siente por mi...
En este 2007 también hubo viajes, más allá de los de ida y vuelta de casa, estuvo bueno el viaje a Córdoba, en el que fuimos con Lau, mi mejor amiga, a visitar a Euge...qué buen viaje! Habíamos hecho las reservas en un hostel...nos tendrían que haber visto las caras cuando llegamos y nos dijeron que habían hospedado en nuestra habitación a unos franceses y que teníamos que dormir en otra pieza. Dormimos con un coreano, un francés, un brasileño y su hermana y con dos estadounidenses...chan! dormíamos quietitas y con un ojo medio abierto...pero no estuvo taaan mal...
¡Qué experiencias! vaya que tuvo de todo este año, y vaya que la pasé bien. El final me falló un poco, pero a lo mejor todavía no puedo sentir lo que racionalmente acomodé en mi cabeza como "lo positivo de que te rompan el corazón". Pero también pienso:"bué nena, vos también querés todo!"... y continúo el pensamiento: "estoy viva, y sentir dolor es lo que más adelante me va a hacer sentir la diferencia"...
En fin, 2007 tuviste cosas espectaculares...gracias por los buenos y por los malos momentos. Gracias a cada una de las personas que hicieron que este año haya sido inolvidable...espero que los 365 días que empiezan a correr en cuatro días lleguen cargados de experiencias nuevas, de más aprendizaje, de más risas, más abrazos y más sueños...pero cambio más besos por amor...y cambio borracheras por más momentos divertidos de lucidez.
Y termino con una frase, con la que salude a mis amigos por mail: "que al final del 2008...como a éstas alturas, podamos decir: "¡Qué buen año!" y agradecer por esos sueños que pudimos tocar con las manos y sentir con el alma. Los tengo siempre en mi corazón..."
Esta noche, después de cinco noches de aquella que estuve mal por amor...después de que la sinceridad de un hombre me haya lastimado hasta tal punto de quedar sin lágrimas, me siento a pensar qué significó este año para mi. Y si me pongo a ver hacia atrás, fue bastante bueno- y se me acaba de dibujar una sonrisa en la cara- veamos...
Los 360 y pico de días que se pasaron dejaron risas, abrazos, sueños cumplidos, sueños nuevos, metas alcanzadas, etapas cumplidas, choques, besos, borracheras graciosas, borracheras desagradables, peleas buenas, viajes...
Camino por la recta final de los "locos 22" años, y es que en menos de un mes vamos para el que sigue y en estos 22, experimenté las risas de esas a más no poder, de esas que llorás y que te hacen doler los cachetes. Risas por las payasadas de mi hermano Facu, cada fin de semana que vuelví a esta casa; risas por las macanas que hablo sin saber y que provocan la carcajada de mi mamá que con sólo mirarme sabía que no tenía idea de lo que hablaba; risas de las cosas que vivimos con la Ju en el dpto cada vez que entró esa maldita mariposa marrón enorme, de esas que salen en verano y a las que le tengo terror... Pensándolo bien...este año fue gracioso...muy...
Me queda la imagen de los abrazos de cada fecha especial, y de cada martes cuando vuelvo a la casita y dejo el hogar de mis papás, el abrazo de Ju ese día que no sabía donde estaba y que me preocupé tanto...los abrazos de mis amigos, se me vienen a la cabeza los últimos, precisamente los del sábado a la madrugada mientras César me decía..."Ay, Vick, no llorés así, no vale la pena"...Uf...hubo todo tipo de abrazos...y cada uno me llenó el alma.
Si hablo de los sueños cumplidos...y de las etapas concluidas, este año terminé mi posgrado y agregué una palabra más a mi nombre profesional: "Especialista en Dirección de Recursos Humanos"... Chuuuu! ¡cómo suena! Y sí, fueron casi dos años de estudio fuleros... si me acuerdo que ese marzo que comencé estaba muerta de miedo, miedo de encontrar en el posgrado mi "techo" intelectual y de decir "hasta aquí llego, la cabeza no me da para más". Y aunque no me jacto de ser inteligente, lo terminé y con la mejor de las notas-más allá del hermoso nueve de mi trabajo final- estoy orgullosa de mi desempeño para qué les voy a mentir. Todavía no tengo el cerebro achicharrado así que... voy a ir por más!
¿Sueños nuevos? de eso se trata, no? de ir alcanzándolos, renovándolos, persiguiéndolos, intentando volar alto...proyectando redoblar la apuesta y alejarme de la casa, de la casita, de la flia, de los amigos y partir al otro lado del océano y probar cuánto mi espíritu soporta mi cuerpo y cuánto mi cuerpo soporta mi alma.
Este año también dejó choques...sí...mujer al volante...jajaja un amigo me dijo: " cuando alguien te putee cuando vayas manejando vos respondé y bueno, soy mujer". Así, cada vez que tuve un problema llamé a mi amigo Martín, él- incondicional- acudió ante cada percance automovilístico. "Hiciste aca el auto!-me dijo a mitad de año mi papá- venías fuerte?" y yo: "no, bueno...definí fuerte"...hasta que me solté y hoy puedo decir que me doy maña en el tutú, jajaj...no soy un corredor de fórmula uno, pero ahora puteo y todo...
Qué decir de los besos...hubo buenos, muy buenos...de esos tímidos, de esos fogosos, de esos enamorados...son y van a ser involvidables y dejaron sensaciones grabadas a fuego en mi, a pesar de que la persona que me dio los más lindos y rememorables es la que más me lastimó...pero si no me arriesgaba nunca iba a conocerlo, son las reglas del juego, eso creo.
Y es el turno del control de alcoholemia...juaz! no, nunca conduzco ebria...este año experimenté con gracia y junto a mis mejores amigos los efectos del toc toc...y se me vienen a la cabeza las noches en "El Rancho" con la Ju, Rodo, Martín, Maxi, Euge, Soto!, Emilio y Machi en la barra pidiendo ¡tequila, tequila! y venía el tipito de la barra con la sal, el limón y la bebida que nos hacía mover el piso...cómo nos divertimos!...Después, las salidas de "La boite" con la Pivi y nuestros cantos al compás de algún ritmo que inventamos, con la letra de improvisada sobre algo que acabábamos de ver, mientras caminábamos buscando el taxi que nos lleve a casa...y a dormir. La peor de las borracheras, también la tuve y fue la que provocó una de las peores peleas con mi hermana, pero de la que prefiero ver la parte buena- porque la mala fue que se asustó tanto que tuvo que ir a una sala de emergencias, porque le subió la presión- sí, le puedo ver la parte buena...y es que ahí me cayó la ficha que allá, en la casita, estamos sólo las dos y que nos tenemos que cuidar y que somos responsables por la otra, su susto me demostró cuánto me ama y su preocupación cuan responsable se siente por mi...
En este 2007 también hubo viajes, más allá de los de ida y vuelta de casa, estuvo bueno el viaje a Córdoba, en el que fuimos con Lau, mi mejor amiga, a visitar a Euge...qué buen viaje! Habíamos hecho las reservas en un hostel...nos tendrían que haber visto las caras cuando llegamos y nos dijeron que habían hospedado en nuestra habitación a unos franceses y que teníamos que dormir en otra pieza. Dormimos con un coreano, un francés, un brasileño y su hermana y con dos estadounidenses...chan! dormíamos quietitas y con un ojo medio abierto...pero no estuvo taaan mal...
¡Qué experiencias! vaya que tuvo de todo este año, y vaya que la pasé bien. El final me falló un poco, pero a lo mejor todavía no puedo sentir lo que racionalmente acomodé en mi cabeza como "lo positivo de que te rompan el corazón". Pero también pienso:"bué nena, vos también querés todo!"... y continúo el pensamiento: "estoy viva, y sentir dolor es lo que más adelante me va a hacer sentir la diferencia"...
En fin, 2007 tuviste cosas espectaculares...gracias por los buenos y por los malos momentos. Gracias a cada una de las personas que hicieron que este año haya sido inolvidable...espero que los 365 días que empiezan a correr en cuatro días lleguen cargados de experiencias nuevas, de más aprendizaje, de más risas, más abrazos y más sueños...pero cambio más besos por amor...y cambio borracheras por más momentos divertidos de lucidez.
Y termino con una frase, con la que salude a mis amigos por mail: "que al final del 2008...como a éstas alturas, podamos decir: "¡Qué buen año!" y agradecer por esos sueños que pudimos tocar con las manos y sentir con el alma. Los tengo siempre en mi corazón..."
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